¡Hola amigos! El día 30 de abril asistí a una conferencia muy interesante aquí en Burgos, bajo el título «40 años liberando esclavos». Ehsan Ullah Khan, nos recordaba la labor que llevan a cabo desde el frente de liberación del trabajo de Pakistán (del cual él es el fundador), hoy en día conocido, sobre todo por haber liberado a uno de los niños esclavos de aquel país, Iqbal Masih, que con su testimonio, dedicación y fuerza vital, emocionó a multitud de personas en todo el mundo.

Ese día me impactó hacer frente a la realidad. Ehsan nos hizo entender con su charla, que cada vez que compramos un producto hecho con el sudor, lágrimas y esclavitud de los más necesitados, (en su mayoría niños y mujeres), contribuimos a que otros muchos más caigan en el engaño de convertirse en esclavos, por un euro al día.

Mi fe me dice, que esto es una pesadilla que acabará un día, pero hasta entonces, no quiero mirar a otro lado. Quiero mirar de frente a esos niños que con los mocos cayéndoseles por la boca mientras intentan sostener su peso en ladrillos u otros productos a entregar a esas multinacionales que subcontratan a estos empresarios esclavistas y decirles, que YO NO QUIERO ESO PARA ELLOS y que lucharé desde mis posibilidades, para que eso algún día, PUEDA TERMINAR. De otro modo sé, que me avergonzaría de mi misma.

¿Cómo hacerlo? Esta es la pregunta que los asistentes al evento, nos hicimos de inmediato. La respuesta que Ehsan nos daba era la de no comprar en esos lugares que  se despreocupan de quien y como se hacen sus productos. De ese modo conseguimos  no colaborar con ese DESPROPÓSITO. Los gobiernos deberían hacer algo y por supuesto, nosotros, la sociedad.

Pero desde aquí y desde donde proceda, quiero denunciar este hecho a mi gobierno y gobernantes. No quiero que mi país sea cómplice de esta barbaridad. Hay más de seis millones de españoles en paro, que por supuesto no quieren (queremos), ser esclavos, solo tener un trabajo y sueldo digno. Estas empresas podían dar ese trabajo Y NO LO HACEN. Prefieren ESCLAVIZAR A LOS MÁS DÉBILES Y QUIERO DENUNCIARLO.

Me imagino que podéis pensar que es imposible comprar sólo aquellos productos hechos dignamente, pero no lo es tanto. Yo ayer miré todas las etiquetas de los productos que iba comprando y sólo elegí los MADE IN SPAIN. Al menos es un principio. Si buscamos, encontraremos, MERECE LA PENA HACERLO, aunque sólo sea, para que podamos mirarnos al espejo y que nos guste lo que vemos.

Gracias amigos por escuchar, leyendo. Hoy en día no es nada fácil hacerlo, pero puede salvar muchas vidas.

LOVE, Carmen.