Hola amigos de mi blog. Hace unos días que quiero tratar un tema tan cotidiano como el día a día. Porque cada día sale el sol para alimentarnos pero también muestra su rostro el invierno para helarnos. ¿Cuál es nuestra posición frente a ello?
Creo que en qué punto pongamos nuestra ATENCIÓN, marca la diferencia. Sin embargo, está claro que por mucho que comprendamos la importancia del positivismo, no siempre se consigue quitar la escarcha. Por eso os contaré algún truco que nos conecte con las grandes posibilidades de cada día.
Me centraré en tres:
Primero: AGRADECER cada mañana la VIDA y todas las manifestaciones de AMOR que vamos a poder aportar un día más, sabiendo que ese es nuestro GRAN PODER.
Segundo: inspirar pausadamente para recoger la dicha de saber que estamos tratando de dar lo mejor de nosotros y por tanto, este camino nos llevará a la ETERNIDAD y a la PROSPERIDAD. Siéntelo. Te será fácil, porque está inscrito en tu SER.
Tercero: saber que no hay mal que cien años dure. No hay verano sin invierno. Estas APRENDIENDO y cuando conozcas lo suficiente, VERÁS lo que ahora está oculto. Utiliza el poder de tu sonrisa, de tu amabilidad, comprensión, humildad para seguir aprendiendo y como no, estar dispuesto a dar un buen consejo sincero, que no busque el aplauso sino el CAMBIO que todos podemos dar y que tiene que empezar desde uno mismo.
¡Se valiente!, siendo aquello que cada día estás llamado a ser y todo lo demás, se dará por añadidura.
Recuérdatelo una y otra vez, las veces que hagan falta y tu único destino podrá ser: LA VICTORIA.
LOVE, Carmen.
Muy buen post. Me ha gustado mucho. Un saludo
Muchas gracias Enrique. Me alegra que te haya gustado. Bendiciones.