
«Aprendiendo juntos»
Hola de nuevo amigos. He hecho una pequeña parada en mi blog, hoy sábado, en medio de este puente que nos viene a muchos tan bien para salir de la monotonía y de este sentimiento de crisis que cada día nos recuerdan en los medios y en nuestra rutina diaria carente de un trabajo remunerado.
Me apetecía dejar una de mis reflexiones compartidas con todos vosotros, en especial sobre un teme que últimamente lo veo algo recurrente en uno de mis ámbitos sociales, la igualdad de sexos que para algunos es llevar al hombre hacía el lado femenino.
Confieso que aunque coincido con la idea de que el hombre tiene muchas, muchas, cosas que aprender de la mujer, de nuestro lado femenino, quizás más sensible, previsor, empático, dulce y a la vez, sacrificado hasta negarse a si mismo, reconozco que el lado masculino, algo más frio y calculador, en algunas ocasiones viene pero que muy bien, para afrontar momentos en la vida, en los que se requiere esa sangre fría.
Pero no solo eso, también me preocupan, esas mujeres que pretenden luchar por los derechos de la mujer, olvidándose de ser mujer. Dicho de otra forma, olvidándose de lo hermoso que es ser madre y consecuente con ello, de dedicarte al trabajo que te gusta, sin olvidarte de las necesidades de tus hijos y los tuyos propios, de luchar por realizarse profesionalmente, sin descuidar a la familia, ni a nosotras mismas.
Creo que hay tiempo para todo, bien planificado. Sí se avanza para lograr la conciliación entre la familia y el trabajo, todos saldremos ganando. No se puede mirar hacía otro lado ante las necesidades de nuestros pequeños, ni dedicarse sólo exclusivamente a ello, olvidándonos de otras necesidades.
En resumen yo diría, que me encanta que el hombre haya sido y sea tan luchador por sobrevivir y buscarse su territorio y una familia, siempre y cuando esté creado con sensibilidad, coherencia y abnegación hacía lo que realmente merece la pena en esta vida y perdura eternamente…, en nuestras mentes aparece y en nuestros corazones está impreso, por ello queridos amigos, como siempre, un abrazo y para todos; mucho amor. Carmen.