¡Hola a ¡Hola a todos! Acabo de escuchar una opinión de alguien que afirma que no es verdad que todo se pueda lograr. Hace una diferencia entre pasión y talento pero no del mismo modo que yo lo veo.
Él afirma que si “no tienes talento” para hacer algo (dato que considero subjetivo en muchos casos), por mucho que te apasione un objetivo, no se puede lograr y yo pienso justo lo contrario. Es más, pienso que como no luches con todas tus fuerzas por lograr aquello que te apasiona, nunca podrás ser feliz.
Además conjugó estos dos aspectos; talento y pasión, de diferente modo. Él anónimo profesor expuso que si algo se te da mal (poniéndote en el peor de los casos), por mucho que te apasione, nunca lo lograras y el insistir en esta idea “estéril” además, conllevará tu infelicidad. Mi idea, totalmente opuesta, cree que precisamente tener pasión hacia algo, es poseer el amor suficiente como para realizar dicha tarea las suficientes veces como para que optimices esa labor. Si algo te apasiona, puedes emplear en ello todas las horas, días, meses, años, siglos, que sean necesarios, porque disfrutas haciéndolo. Sin embargo, emplear tu tiempo en algo que no te hace vibrar del mismo modo, nunca te podrá dar el mismo resultado o placer.
En numerosas ocasiones he oído decir a grandes estrellas de todos los ámbitos profesionales, que detrás de su obra hay mucho trabajo y esfuerzo.
Además nadie como uno mismo para saber si algo que los demás no ven, tú si lo ves. Todos nos podemos equivocar, pero uno mismo es capaz de dilucidar aquello que puede o no puede hacer por el tamaño de pasión y amor que exista en su interior. Los límites están en la cabeza, nunca en el corazón. Pero no le pidas a la cabeza que entienda de ello, porque su cometido es otro. Sin embargo nosotros poseemos ambos sentidos para enriquecernos de ellos. De nosotros depende quien manda sobre quién.
Y es que nadie dijo que esto fuera fácil. Perseguir un sueño cuesta sudor y lágrimas; muchas. Pero nadie nos entrena para ello. Solemos ir a lo fácil. Pero lo fácil crea insatisfacción a mi modo de ver. Además creo que nos pongamos como nos pongamos, o hacemos aquello que nos dice el corazón que hagamos o no llegaremos a nuestra plenitud. Por tanto, cuanto antes se empiece a entender que te cueste lo que te cueste llegar a alcanzar tu sueño, es la única opción que te hará libre y pleno, mejor, para que antes te pongas a ello. Y no se me ocurre una fuerza mayor y mejor para guiarte en esa gran aventura que la FE.
Si nadie lo ve, pero tú lo ves, mi consejo; ¡A por ello! ¡Olvídate del mundo!, EL AMOR ENCUENTRA EL MODO. Si te agarras a esta máxima, lo harás y disfrutarás en el camino de esta aventura que tiene un sentido hermoso; encontrarte a ti mismo del modo en el que te dicta esa PASIÓN que todo lo mueve, cueste lo que cueste. ¿Hay acaso algo que merezca más la pena? En tu respuesta está la verdad. ¡Ánimo hermano!
LOVE, Carmen.