«Admira quien tiene la inocencia de un niño»

Hola amigos. Hoy quería hacer una crítica al comportamiento que habitualmente tenemos los seres humanos con respecto a los demás. Solemos siempre buscar buenos y malos en las diversas situaciones conflictivas que se nos presentan, pero si acudimos al mensaje de Jesús; “solo Dios es bueno” (Marcos 10,18), los demás tenemos “pecados”, hablando con los términos de antes.

Se ve muy claramente esta afirmación que hace Jesús, en un hecho que muchos recordaréis. Me refiero a la lapidación que Jesús evitó que ocurriese, contra una mujer que había cometido adulterio, formulando tan sólo una frase, eso sí, DEMOLEDORA; “el que esté libre de pecado, tire la primera piedra” (Juan 8,7).

Aquí se ve claramente también como Jesús nos instruye para entender que todos somos “pecadores” y que más que juzgar deberíamos ayudar como querríamos ser ayudados (la regla de oro de Cristo, Mateo 7,12). Véase esta respuesta de ayuda en la siguiente escena que se da en ese mismo punto. Jesús, tras ver como todos dejan en paz a la mujer, se acerca a ella y la invita, simplemente, a que se vaya aconsejándola que no peque más, SIN JUZGARLA. Yo me imagino además que Jesús la trataría con delicadeza y la hablaría con una bella expresión en su rostro y en su mirada, reluciendo de amor. Así es el Jesús que yo siento y está en mis novelas; ¡IMPRESIONANTE! “Pa comérselo”.

Bueno, voy a volver al tema que me ocupaba. A lo que quiero llegar es a dejar en nuestro corazón ese mensaje. Cada día nos rodeamos de gente más o menos conocida y la tentación de pasar o no pasar de ellos, está siempre ahí, “atacándonos”, pues que no lo haga. Todos tenemos defectos y cometemos errores y necesitamos esa mirada hermosa, ser escuchados y esas palabras sabias que nos reconforten, llevémoslo a cabo y el mundo comenzará a cambiar, más rápido de lo que podremos imaginar, empezando como debe ser, por nosotros mismos.

Nada más por hoy, amigos. Que os quiero y que me perdonéis si en alguna ocasión no os doy aquello que necesitáis. Espero hacer  lo mismo que aconsejo y tener una sonrisa preparada, al día siguiente.

LOVE, Carmen.

Se me olvidaba; os dejo escrito unos versos que una persona a la que quiero mucho me envió. Como veréis es una enamora de todo en Jesús:

Quisiera ser blanca paloma y volar a los tejados del cielo,

para ver en la santa ciudad, a mi señor Jesucristo

(que es  aquel) a quién yo más quiero.

No hay caricia más hermosa, que la dulce mirada de Dios

Una madre ama mucho, pero mucho más ama Dios.